Como promotor inmobiliario en España, es fundamental comprender la importancia del seguro de afianzamiento de cantidades. Este seguro no solo es una obligación legal establecida en la Ley de Ordenación de la Edificación (LOE), sino que también ofrece ventajas económicas y comerciales que pueden potenciar las ventas y generar confianza entre los compradores. Además, su correcta contratación evita riesgos legales y sanciones económicas que podrían comprometer la viabilidad del proyecto.
Obligación legal según la Ley de Ordenación de la Edificación
La LOE (Ley 38/1999, de 5 de noviembre), en su Disposición Adicional Primera, establece que todo promotor que reciba anticipos de compradores debe garantizar la devolución íntegra de estas cantidades, más los intereses legales, en caso de que la construcción no se inicie o no se complete dentro del plazo acordado.
Formas de garantizar la devolución de los anticipos
Los promotores pueden elegir entre dos mecanismos para garantizar los anticipos de los compradores:
- Seguro de caución: Emitido por una aseguradora, garantiza la devolución del dinero en caso de incumplimiento del contrato.
- Aval bancario: Proporcionado por una entidad financiera, también cubre la devolución de los anticipos, pero puede implicar mayores costes y restricciones financieras.
Protección para el comprador y el promotor
El seguro de afianzamiento de cantidades actúa como una doble garantía, beneficiando tanto a los compradores como a los promotores:
Para el comprador:
- Se asegura de que su inversión está protegida frente a retrasos o incumplimientos.
- Reduce el riesgo de fraudes en promociones inmobiliarias.
- Refuerza la seguridad jurídica en la compra de viviendas sobre plano.
Para el promotor:
- Genera confianza en los compradores, aumentando la captación de clientes.
- Evita litigios y sanciones por incumplimientos legales.
- Mejora la imagen de la promotora, diferenciándola en el mercado.
- Facilita la comercialización de viviendas en fase de construcción.
Además, el seguro de afianzamiento no solo cumple con la normativa, sino que también se ha convertido en un elemento clave para la venta de viviendas sobre plano en un mercado donde la transparencia y seguridad financiera son factores decisivos para los compradores.
Ventajas financieras frente a los avales bancarios
Muchos promotores dudan entre contratar un aval bancario o un seguro de afianzamiento. Sin embargo, este último ofrece ventajas económicas y operativas clave:
- No computa en CIRBE: A diferencia de los avales bancarios, el seguro de afianzamiento no afecta la capacidad de endeudamiento del promotor ni su relación con las entidades bancarias.
- Mayor rapidez de contratación: La tramitación de un seguro de afianzamiento suele ser más ágil y sencilla que la de un aval bancario.
Impacto positivo en las ventas
El mercado inmobiliario actual está cada vez más regulado y los compradores buscan seguridad antes de invertir en una vivienda sobre plano. Contar con un seguro de afianzamiento mejora la percepción de la promotora y puede ser un factor decisivo en la decisión de compra.
Cómo influye el seguro de afianzamiento en el proceso comercial
- Aumenta la conversión de clientes: Al proporcionar una garantía, el comprador se siente más seguro y es más propenso a firmar la reservade la vivienda.
- Diferencia a la promotora de la competencia: No todas las empresas ofrecen la máxima transparencia en la gestión de anticipos. Un seguro de afianzamiento mejora la reputaciónde la promotora.
- Reduce las cancelaciones: La confianza que otorga la garantía disminuye la tasa de desistimientos de compradores.
- Favorece acuerdos con bancos e inversores: Un promotor que gestiona correctamente los riesgos financieros y ofrece seguridad a los compradores inspira mayor confianza en entidades financieras y posibles inversores.




